contexto
Composición de palabras surge, en primera instancia, como una tentativa de respuesta a la pregunta que convoca este proyecto: un cuestionamiento en torno a mi posible relación con la cultura de los pueblos originarios. Ante esta gran pregunta, la respuesta honesta se presentó clara y simple, pues esta relación ha sido prácticamente inexistente, tanto en términos personales, como en cuanto a las preocupaciones que mi obra ha abordado a lo largo de los años. Así, en el marco de esa honestidad inicial, me ha parecido importante proponer(me) un ejercicio en el que se incorporara esta reflexión a aquellos asuntos que me han mantenido ocupada de manera permanente: la imagen fotográfica y su traducción a medios manuales, observaciones a lo infraordinario y, más recientemente, la incorporación de la palabra escrita.
La obra se articula entonces tomando como punto de partida un breve texto de mi autoría:
“Supuse que iba a llover. Hace tres días parecía que por fin el agua aliviaría la tierra, pero no ha sido así. Lentamente comenzaban a brotar minúsculos tallos verdes —apenas visibles a ras de suelo—, irguiéndose con esfuerzo. Y aunque el sol los está quemando, aplastando, sólo me queda confiar en que resistirán hasta que llegue la lluvia. La tierra se seca. Sigo esperando.”
La observación de esta situación ordinaria me ha permitido generar un lugar de encuentro, un espacio común en la sencillez de esa espera; en la inquietud ante la pérdida inminente, su aceptación resignada y, por sobre todo, la esperanza de que el destino sea favorable –una esperanza tranquila, donde la incertidumbre no atemoriza a quien bien sabe que los ciclos vitales se repiten y nunca nada es tan permanente ni absoluto.
La traducción de este relato al mapudungún –y su vuelta al castellano– permitió incorporar sutiles diferencias entre el texto de origen y el resultado final: giros que sumaron pequeñas observaciones desde ese otro lugar en el que quise instalarme sin grandes pretensiones. Los cruces entre idiomas proponen imágenes nuevas, distintas, las que sin abandonar la dirección del camino, sin duda enriquecen el trayecto.
«Mawvnalu felefui. Kvla antv fel fui mawvnalu ko chaufumualo mapu felefui, welu mawvnlai. Wezakechi choyvn kachu pichikey karvn —amvn pewfelei mapu mew— kvmekeci petu tripay. Welu ti antv arei machiao areniei. Mawvnle kvme amui kom. Ankvi mapu xufken felewei. Inche manelnielu.»
«Esperaba que lloviera, pero no llovió. Hace tres días parecía que por fin papá dios traería el agua a la tierra, pero no ha llovido. Lentamente comenzaban a brotar y a salir pequeñas hierbitas verdes —apenas visibles en la tierra—, levantándose con esfuerzo y trabajo. El solo está quemando, demasiado, tanto calor que hace arder, todo sanará e irá bien si llueve. La tierra se seca como ceniza. Sigo esperando y confiando.»
A la imagen que evoca la palabra se le sumó aquella concreta de tres grandes paños de fieltro de lana en dos tonos de rojos, que muestran las ramas de un árbol, las que comienzan más bien desnudas –en el paño de la izquierda– y terminan mostrando indicios del crecimientos de algunas hojas –en el de la derecha–. Al juego de traducciones entre el castellano y el mapudungún se le sumaron las de la imagen, que transita desde la imagen del árbol en negativo en el primer paño –del vacío que provoca el calado en el fieltro–, pasando al positivo en el paño central, y volviendo al negativo en el último.
Imagen y palabra en constante transformación parecieran indicar entonces que la respuesta debiese incorporar la inestabilidad como asunto central: la impermanencia, la fragilidad que provoca no saber bien a qué atenerse o, tal vez, la demostración de que las respuestas pueden ser muchas y muy variadas. La diversidad de manifestaciones de la lengua mapuche –que ha planteado una serie de dificultades que en alguna medida se han hecho visibles en este ejercicio–, refleja la imposibilidad de la certeza, al tiempo que evidencia la complejidad, pero por sobre todo, la riqueza del encuentro.
Traducción al mapudungún –y de vuelta al castellano– de Carmen Caripan Catricura y Margarita Ortiz-Caripan
exhibido en
Diálogos del Reconocimiento
21 abril - 02 agosto 2015
Exposición colectiva en Centro Cultural Palacio La Moneda.
Diálogos del Reconocimiento
17 diciembre - 15 marzo 2015
Investigación y Creación en la interculturalidad con los Pueblos Originarios.